El río que nos lleva

El Grupo Iro XXI pone sobre la mesa el pasado presente y futuro del cauce que ha escrito la historia de Chiclana

Aunque en los últimos años, décadas, el Iro solo ha sido objeto de debate, noticia y comentario por el miedo a que, como ya sucediera en 1965, se pudiera producir una riada; lo cierto es que es mucho más, infinitamente más. Tanto es así que sin él, sin esas aguas que desembocan en la Bahía de Cádiz y que sirvieron de vía de entrada/conquista a los fenicios, ni tan siquiera existiría Chiclana.


Historia, como todas, de claros y oscuros, que es muy desconocida por una población que, en su mayoría, procede de otras localidades de la provincia y que, tal y como ha hecho el Grupo Iro XXI, es muy necesario poner sobre la mesa para, desde el debate y el consenso, lograr la inclusión y puesta en valor del río en un ‘paisaje’ que ha experimentado un gran desarrollo en los últimos tiempos.


“Creemos que es más bien una mezcla de indiferencia y desconfianza la que refleja la relación actual de Chiclana con su río”, de ahí que, tal y como señala Ángel Gil Gahete, presidente de la Asociación Grupo Iro XXI, “este libro nace de un sentimiento de desazón, rebeldía antes esta actitud”.
Y es que hubo un tiempo en el que el Iro fue ese nexo de unión, comercio, etc. con el resto de poblaciones, dando lugar a puentes, puertos, etc.

Román: “Mirando al río, a su Alameda, a sus riberas… , analizar posibilidades es una obligación y un reto ilusionante”


“En el Iro se agolpan muchos de mis recuerdos y de otros muchos chiclaneros. Era ese lugar al que íbamos los niños y familias”, recuerda José María Román, “a disfrutar de los juguetes y bicis el día de Reyes, tal y como sucede hoy en el Paseo Marítimo de La Barrosa”.


“El río que dio origen a la ciudad, por donde entraron los fenicios, que generó la aldea de pescadores dos mil años después y que hoy”, resalta en su introducción, “nos vemos, está ahí”.


Historia, realidad y sentimientos que “por eso, mirando al río, a su Alameda, a sus riberas, a las edificaciones, marismas, a su historia, y analizar posibilidades es una obligación y un reto ilusionante”.
Compromiso de mirada al Iro al que también alude en su artículo el delegado de Medio Ambiente y vicepresidente de Chiclana Natural, Roberto Palmero.
“Ahora”, propone, “es el futuro al que tenemos que mirar y este libro no puede llegar en mejor momento, porque Chiclana es una ciudad cambiante y los próximos años van a ser determinantes para su futuro y desarrollo. Planeamientos urbanísticos, fondos de recuperación, cambio climático o la transformación de territorio son realidades con las que convivimos a día de hoy. Y el río tiene que ser el centro de estos debates”.
Necesaria reflexión y debate que va a y debe cobrar fuerza gracias a esta destacada publicación a cargo de José J. de Mier Guerra, Manuel Sierra Casanova, Paloma Bueno Serrano, Juan Carlos Rodríguez, Agustín Castillo Butrón, Víctor Muñoz López, Francisco Javier López Macías y Ángel Gil Gahete.


Además, con 342 páginas, ‘El Iro más que un río’ está ilustrado con más de ochenta excelentes fotografías de Pedro Leal y una docena de dibujos de José Luis Díaz de la Torre.