Una necesaria y emocionada mirada al pasado

Bajo el nombre de ‘Gente ‘daqui’. La memoria de un pueblo’, el Museo de la Ciudad acoge una exposición que refleja la historia de Chiclana y los chiclaneros

No hay nada que nos reconforte más y, a la vez, nos emocione que asomarnos a nuestro pasado y, como decía la canción, ver cómo hemos cambiado.

Y es que, a veces, solo con esa mirada por el retrovisor somos capaces de ver, de apreciar de verdad, todos los cambios que han experimentado la ciudad en la que vivimos, Chiclana, y, aún más importante, aquellas personas, conocidas o no, que han escrito su pasado y construido su presente.

Mirada que se antoja perfecta si se hace a través de la fotografía, ese formato que ha escrito tantas y tantas páginas de la historia.

Mil y una imágenes de Chiclana

Fotografías que son las grandes protagonistas de la exposición ‘Gente de ‘daquí’. La Memoria de un pueblo’ y cuyo objetivo en su tiempo, tal y como resalta Pepa Vela, delegada de Cultura, “fue conservar la imagen de las personas que quisimos, la imagen de quienes fuimos y a los que remotamente aún nos parecemos; ser la apoyatura física o gráfica de la memoria para cuando esta flaquee; guardar para luego una alegría presente y pasajera”.

 Se trata de fotografías realizadas de manera sencilla en el ámbito laboral, en el familiar o en ratos de ocio, entre otros. “Fotos”, añade, “que no pretendieron, en su mayoría, trascendencia alguna más allá del ámbito privado. Pero hoy, todas cobran un relieve documental que, nos hablan, a través de ellos, de otra manera de ser en el mundo, de otra manera de vivir. Fotos que nos hablan, de Chiclana. Por eso, esta reunión de pequeñas memorias y de no pocos olvidos, devienen hoy memoria de un pueblo como bien expresa el subtítulo”.

Calle de Chiclana

Organizada por Francisco Montiel y Juan José Foncubierta, y el representante de la familia Quijano, José Manuel Quijano, es una de esas exposiciones que hay que ir a ver, ya que, además de ser un sobresaliente testimonio histórico, concentra mil y una emociones de una Chiclana que no deben olvidar quienes siempre la han habitado y deben conocer esos otros que, no hace mucho, la han elegido para vivir en ella.

Así que nos vemos en el Museo de la Ciudad. La exposición estará abierta hasta el 17 de enero.