El restaurante Popeye rinde homenaje al buen producto local con un postre con destacado protagonismo de las famosas Tortas de las monjas
El universo de sabores y texturas de Chiclana se antoja casi infinito, de eso sabe mucho la rica gastronomía local y, aún más, quienes a lo largo de los siglos le han dado forma con un sinfín de sugerentes propuestas. Bocados, tradicionales e innovadores, que tienen como punto de partida los excelentes productos que manan de viñas, esteros, huertas…
Propuestas tan exquisitas, creativas y apetitosas como la que, a propuesta de Destino Chiclana, ha elaborado una de las cocinas con ADN cien por cien chiclana, la del restaurante Popeye.
Su nombre lo dice todo, ‘Sor Chiclana’, un acertado homenaje a uno de las grandes productos de la repostería chiclana, la famosa Torta de las monjas.
Se trata de un vistoso trampantojo; un racimo de uvas al que contribuye un moscatel de Primitivo Collantes.
“La uva está cubierta de gelatina macerada durante dos días y rellena con una reducción de torta de las monjas, en el que predomina el sabor tan exquisito de este producto. Lleva también una falsa tierra hecha con vino y chocolate entre otros ingredientes”, ha señalado Tomás Mayo, que otorga la creación de este singular postre a su hermana.
Si espectacular resulta este postre visualmente, más aún lo es en boca.
“Estos sugerentes platos son muy importantes para proyectar a toda España qué es Chiclana, cuáles son nuestros productos y la imagen de nuestra ciudad. Para este equipo de Gobierno es un orgullo que trabajéis con la calidad y excelencia que os caracteriza”, ha señalado la delegada de Turismo, Pepa Vela.